Los Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA) como son; la anorexia nerviosa, bulimia nerviosa, el atracón así como la evitación y restricción de la ingesta de alimentos, están asociados con problemas mentales como depresión, ansiedad y estrés, pero también influyen otros factores como la educación en casa, la genética y las redes sociales en donde se generan mensajes frecuentes de altos estándares de belleza.
En el Departamento de Nutrición de la Dirección de Salud Municipal de Gómez Palacio, recientemente se detectó un incremento de pacientes con TCA´s, y de tener un menor número de casos, en la actualidad de 10 consultas, 2 acuden por este tipo de trastornos.
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Ricardo Reyes Ramírez licenciado en Nutrición, y titular del Departamento, señaló que los pacientes que atienden con este tipo de problemas alimenticios, son principalmente niños, adolescentes y adultos jóvenes que acuden para corregir sus hábitos nocivos, en la mayoría de los casos generados por la influencia de las redes sociales.
“Aquí les damos la orientación, les hacemos la corrección a ese tipo de conceptos y pues los canalizamos con una dieta saludable”.
Bulia y anorexia, los trastornos más atendidos
Los principales trastornos que atienden son bulimia y anorexia y que han detectado que su orígen se ha derivado de las redes sociales en donde se promueve la dieta cetogénica o mejor conocida como keto.
“Es la dieta de ayuno intermitente, que muchas veces en la redes sociales lo tergiversan y más que nada las mujeres jóvenes son las que vienen más con ese tipo de problemas”.
Llamó a los padres de familia a estar atentos a la alimentación y el comportamiento de los hijos y en caso de detectar una situación de esta naturaleza, acudir con un especialista.
“Ese tipo de abordaje se tiene que hacer también con un psicólogo, primero que estén atentos en la manera de comer de sus hijos, lo que consumen en redes sociales y en el supuesto que sospechen de alguno de estos padecimientos” agregó.
Reyes Ramírez señaló que los pacientes que llegan a la consulta con un Trastorno de Conducta Alimentario, son personas de 10 a 25 años, es decir, niños, adolescentes y adultos jóvenes. Y alrededor del 90% son mujeres.
Consultas en Salud Municipal
El Departamento de Nutrición de Salud Municipal de Gómez Palacio, brinda consulta con cuota de recuperación de 30 pesos, y los servicios que brinda son una valoración nutricional completa, se les toma el peso, porcentaje de grasa, músculo, circunferencia, cintura, cadera, estatura. Además dan contención a problemas de diabetes e hipertensión, y está disponible para toda la ciudadanía.
Las dietas se elaboran en base a diferentes factores, como la edad y el estilo de vida de cada paciente, “no es lo mismo un jornalero, un estudiante, una persona que trabaja en la noche en la maquila nos ajustamos a cualquier tipo de personas”
Los s antes de acudir, deben primero realizar una cita al 8711751000 extensión 352, y las recomendaciones es acudir con ropa cómoda y recordar que al momento de realizarles la valoración deben retirarse los zapatos y calcetines.
Atención psicológica
Erika Janeth Muñoz Narvaéz, Licenciada en Psicología, forma parte del staff de psicólogos y profesionistas de la Subsecretaría de Educación de la Región Lagunera Durango a cargo de Fernando Ulises Adame de León quienes llevan a cabo un trabajo colaborativo en diversos proyectos para la atención y capacitación tanto para los docentes como para los padres de familia del sector público.
Las atenciones se han brindado a 64 secundarias distribuidas en 11 municipios a cargo de la Subsecretaría, así como también a diferentes preparatorias.
Conforme a las estadísticas, en el nivel secundaria se ha detectado un 20.93% de problemas de ansiedad, 22.83% de depresión y 10% alimenticios. Mientras que en el nivel preparatoria se registra un 9% de alumnos con problemas de ansiedad, el 14% de depresión y el 8% alimenticios.
Cabe destacar que en la Región Laguna Durango se cuenta con 5 centros del programa de Unidades de Servicios de Apoyo a la Educación Regular (USAER), a donde acuden alumnos con problemas de aprendizaje, los cuales pueden surgir por diferentes factores, como la salud mental.
Su experiencia como psicóloga, además de hipnoterapeuta clínica y maestra en educación abarca un periodo de diez años y durante este tiempo ha observado como problemas de la salud mental han aumentado en los adolescentes principalmente depresión y ansiedad y en algunos casos, entre los síntomas se presenta la anorexia nerviosa, que es cuando una persona deja de consumir alimento o baja la ingesta, y se reproduce en una pérdida significativa en el peso.
¿Cuáles son las señales de alarma?
Para saber cómo ayudar a una persona con Trastornos de Conducta Alimentaria, el primer paso es confirmar el diagnóstico, lo cual no es sencillo.
Esto se complica por la misma naturaleza del comportamiento de los adolescentes, pues en la mayoría de los casos, buscan esconderlo además que se les complica abrirse por completo con los padres porque finalmente representan una figura de autoridad,
“Entonces a veces los mismos amiguitos nos vienen a decir, es que fulanita tiró el lonche, o no es la primera vez que tira su lonchecito”.
Entre las señales, principalmente las chicas empiezan a vestirse con ropa más holgada porque les da pena mostrar el cuerpo, en temperaturas de 30 grados suelen utilizar algún tipo de sudadera.
Otra conducta, es que empiezan a justificar también el no comer, o el que compre excesivamente comida chatarra o ese tipo de alimentos y que luego inmediatamente después de consumirlos acudan al baño para a lo mejor provocarse en algunos casos el vómito.
Con los amigos, sacan miles de pretextos para no consumir el alimento como “ya desayuné en casa” y “no tengo hambre” y buscan este tipo de salidas para no tener ingesta de alimentos.
“Si empezamos a ver este tipo de conductas hay que poner atención, si” expresó.
Al interior del hogar se presentan conductas similares como evitar comer, a diferencia de antes, ahora ponen más atención en el índice calórico de los alimentos, se empiezan a involucrar en la preparación de las comidas, y también a fraccionar la alimentación en partes muy pequeñitas, para evitar el consumo.
Suelen aumentar actividades físicas, pues en su creencia, solamente así pueden consumir más calorías, o empiezan a ingerir laxantes en exceso.
Otra conducta de alerta, es cuando empiezan a desaparecer de la alacena de la casa comida que a lo mejor no se terminaba anteriormente, como el alimento chatarra, principalmente cuando se presenta en un corto periodo de tiempo.
“También es una señal porque a veces dentro de los trastornos alimenticios ocurren los atracones de comida justo, va a haber chicas que vayan después corriendo al baño para provocarse el vómito de alguna manera o habrá quien no, que nada más presente el atracón de comida”.
Recomendación a padres de familia
La recomendación a los padres de familia, en caso de notar estas conductas y sobre todo que ya se empiezan a reflejar en la parte física en los adolescentes, es principalmente solicitar apoyo de un experto. Así como tener apertura al diálogo, pero sin juzgar, ni regañar, sin devaluar.
“A lo mejor la primera reacción que hay como padres o figura de autoridad es “eso no se hace”, “eso no está bien”, pero si tenemos un diálogo un poco más abierto omitiendo a los mejor la parte de juzgar, de regañar, y escuchando lo que realmente nuestros hijos están pensando o cuál es su sentir en ese momento, pues podemos tener este diálogo de respeto y podemos orientarlos un poco mejor a nuestros hijos, en donde la conducta que están teniendo obviamente trae consecuencias negativas tanto físicas como emocionales”.
Al finalizar Múñoz Narvaez recordó que “cualquier padecimiento que genere un deterioro en nuestros niñas, niños y adolescentes es importante por más mínimo que sea el porcentaje”.
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