El payaso mexicano Izmir Gallardo asegura que la alegría y la magia que surgen con el espectáculo Slava's Snowshow invitan a los adultos a volver a sentirse como niños y a jugar como si lo fueran.
“Es un espectáculo mágico, de payasos, que alcanza unos niveles de poesía tan hermosa que el público queda cautivado e invita a los espectadores a volverse como niños”, comenta a MILENIO a propósito del regreso del show creado desde 1993 por el ruso Slava Polunin después de su paso por Cirque du Soleil.
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Por invitación de Polunin, Izmir Gallardo se sumó al espectáculo internacional después de su primera presentación en México, en 2006, y ahora encabeza a una tropa de siete payasos con que el Slava's Snowshow comenzó una gira por cuatro ciudades del país a partir del pasado 14 de mayo y hasta junio.
La gira comenzó en el Teatro Hidalgo (avenida Hidalgo 23, Centro) de Ciudad de México, con funciones de miércoles a domingo del 14 al 25 de mayo; después se irá a Acapulco del 29 de mayo al 1 de junio; continuará en Guadalajara del 4 al 8 de junio y cerrará en Monterrey del 11 al 15 de junio.
“Desde que debutó en México en 2006 Slava's Snowshow ha cautivado al público este juego de comedia, con un teatro de payasos que no habla, con mucha poesía visual en cuanto a composición, escenografía y vestuario se refiere”, asegura Izmir Gallardo, quien conoció a Polunin en una fiesta.
Recuerda que el payaso ruso creó los números de payasos del espectáculo Alegría del Cirque du Soleil en 1992 y un año después decidió estrenar su propio show con los mejores números de toda su carrera.
Desde entonces, Slava's Snowshow se ha presentado en numerosas ciudades de más de 80 países y ha cosechado premios como: Olivier, Drama Desk, Trimph, Nariz de Oro y Lunas del Auditorio Nacional.
Izmir Gallardo subraya que el espectáculo que se presenta en todas partes es el mismo que el que creó Polunin hace 32 años, pero al mismo tiempo es distinto porque en cada ocasión es un elenco diferente.
“Cada payaso imprime su sensibilidad y sentido artístico. Además, como artistas y personas hemos cambiado y los espectadores también, eso le da una riqueza que mantiene el show vivo”, sostiene.
Slava's Snowshow incluye dos actos, con un intermedio. El clown con formación actoral describe que no se trata de una narrativa tradicional, sino que está compuesto por varios cuadros escénicos.
“Se inicia en el límite con un payaso en escena con una soga al cuello que busca dónde colgarse, encuentra a otro payaso que está haciendo lo mismo; y empieza un juego escénico que se desarrolla entre los dos, surge la amistad, el juego, a través de un itinerario por la nostalgia, la soledad, que culmina con el momento pico de la tormenta de nieve de pelotas gigantes dentro de todo el teatro.
“La tormenta es la vida, se viene sobre de ti y no hay más que disfrutarla porque está llena de alegría también, a pesar de los contraluces que puede haber. En ese sentido, Slava's Snowshow se parece a la pieza teatral Esperando a Godot, de Samuel Beckett, con Vladimir y Estragón”, añade Izmir Gallardo.
PCL
