La tragedia de Federico García Lorca Bodas de sangre vuelve con una nueva producción ambientada en el norte de México, dirigida por Angélica Rogel y protagonizada por Ángeles Cruz, Ana Guzmán Quintero, Miguel Tercero y Romanni Villicaña, en el Foro Shakespeare del 9 de mayo al 29 de junio.
“Como un homenaje a la obra de García Lorca, en este montaje jugamos a tejer la tragedia, a traerla a México, a hacerla nuestra, a hacerla presente: tan presente como su voz. Tan humana, como lo fue él y como lo son sus palabras”, explica Rogel sobre su puesta en escena con escenografía de Javier Ángeles.
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Óscar Uriel y Woo Teatro producen la nueva versión de Bodas de sangre, una de las tres tragedias rurales del dramaturgo español (con Yerma y La casa de Bernarda Alba), escrita en 1931 y estrenada en hasta 1933 en Madrid. Fue su única pieza dramática que García Lorca (1898-1936) vio representada.
“La obra de García Lorca está plagada de amor, de ese amor heredado, torcido, señalado, del que duele. Y la trilogía de tragedias rurales es uno de sus reflejos más claros. Bodas de Sangre es una de ellas; y, en lo personal, es la que más duele: la del amor heredado. Construye la tragedia desde el sino, pero educación es destino. Y ver a los personajes precipitarse a su dolorosa tragedia ante la imposibilidad de reconocer su huella original es tan triste que resulta imposible no engancharse”, añade Angélica Rogel.
La puesta en escena de Rogel retoma el drama rural del poeta granadino y lo ambienta en el norte del México actual, en el que una novia (Guzmán Quintero) se prepara para sus nupcias con un hombre conservador (Miguel Tercero), mientras ella sigue enamorada de Leonardo (Romanni Villicaña).
Completan el elenco la también cineasta Ángeles Cruz (La madre) y Eduardo Candás, Luna María Kemp, Luz Olvera y Joan Santos, en diferentes roles del montaje con funciones de viernes a domingo.
Llamado por su autor “Poema trágico en tres actos y siete cuadros”, Bodas de sangre somete a sus personajes a temas como la pasión, la vida, la muerte, el conservaturismo, los celos y el machismo.
“Mi interés en montar Bodas de Sangre nace de la misma inquietud de Angélica Rogel de trasladar los acontecimientos relatados por García Lorca en su obra al México actual. Es impresionante ver cómo la temática sigue conmoviendo al público como si el texto se hubiera escrito ayer. Esto sucede únicamente con los clásicos. Me emociona en gran manera ver el resultado de esta interpretación transportada al norte de nuestro país, con nuestra música y tradiciones”, dijo Uriel al presentar la obra en que participan Patricia Gutiérrez en diseño de iluminación y Natalia Seligson en vestuario, sonido y música.
La tragedia atemporal escrita por García Lorca se consumará en el lapso de una hora con 30 minutos.
Destaca en la puesta en escena un elenco encabezado por la actriz oaxaqueña de teatro, cine y televisión, y guionista y cineasta ganadora de tres Arieles, Ángeles Cruz, que en últimas fechas ha denunciado la violencia, asesinatos y la falta de justicia en su comunidad de Villa Guadalupe Victoria, en el municipio oaxaqueño de San Miguel El Grande, donde han transcurrido todas sus películas.
Cruz recién estrenó en este año Valentina o la serenidad (2023), su última película rodada en la región antes de tener que emigrar después de que fue asesinado su hermano Román y varios colaboradores.
También sobresale su coprotagonista la actriz y productora Ana Quintero Guzmán, quien terminó una tercera temporada con el drama de Arthur Miller Todos eran mis hijos, que montó Diego del Río en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico, y quien ha tenido reconocimientos por sus actuaciones en Indecente (Paula Vogel), Incendios (Wajdi Mouawad) o Despertar de primavera (Frank Wedekind).
PCL
