El gobierno de Donald Trump no deportó a ninguna persona con antecedentes penales, ni a ex presidiarios, a través de los pasos en Baja California, aseguró la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda.
“No hemos tenido un incremento realmente, hasta creo que son cifras por debajo, incluso de antes de que ingresara el presidente Trump”, declaró la mandataria.
Ávila Olmeda enfatizó que las deportaciones siguen realizándose de manera habitual y que los migrantes mexicanos repatriados son llevados al albergue Flamingos, operado por los tres órdenes de gobierno.
“No son personas que vengan bajo la orden ejecutiva o istrativa del presidente Donald Trump, ni tampoco ninguna persona que tenga algún antecedente penal”, subrayó.
Por su parte, el secretario de gobierno de Baja California, Alfredo Álvarez Cárdenas, detalló que, en los primeros cuatro días de operación del albergue 'Flamingos', recibieron a unos 200 migrantes.
“A todos se les ofrece la tarjeta del bienestar, incluido el transporte gratuito a sus lugares de origen, cuando así lo deciden”, explicó Álvarez Cárdenas.
El funcionario destacó que la mayoría de los deportados optaron por permanecer en la región, especialmente en Tijuana, ya que muchos tienen familia en Baja California.
“La mayoría también son repatriados que son devueltos uno o dos días después de haber cruzado, o sea, no hay todavía ninguna, digamos, deportación que venga del interior de los Estados Unidos”, añadió.
Al ser cuestionado sobre si recibieron ex presidiarios en el albergue, Álvarez Cárdenas reiteró “ninguno todavía, ninguno, ninguno todavía”.
El albergue 'Flamingos', habilitado desde el pasado lunes, ofrece atención exclusiva a migrantes mexicanos deportados desde Estados Unidos, brindando alojamiento temporal y apoyo para su reinserción.
AV