Antes de ser elegido como líder de la Iglesia católica, el Papa León XIV ya había estado en Coahuila.
Fue hace más de quince años cuando, como parte de su labor pastoral, visitó la ciudad de Ramos Arizpe en su calidad de Padre General de la Orden de San Agustín, congregación a la que pertenece y que desde hace décadas tiene presencia en esta región del país.
- Te recomendamos Feligreses dan gracias por el nuevo Papa León XIV en Torreón Estados

En aquel entonces, Robert Francis Prevost (su nombre de pila) realizó un recorrido por diversas parroquias de la orden en México, incluyendo la de San Nicolás de Tolentino en Ramos Arizpe, donde convivió con religiosos de este estado y sostuvo encuentros con la comunidad. Su paso no pasó desapercibido: fue cercano, sencillo, atento, y mostró un profundo interés por las realidades de la vida pastoral en el norte del país.
Comió en Saltillo
Además, se sabe que durante su estancia tuvo la oportunidad de trasladarse a Saltillo, donde compartió mesa en algunos restaurantes y degustó comidas típicas de la región. Su visita fue recordada por su amabilidad y por la forma en que se tomó el tiempo de convivir con quienes lo rodeaban, sin prisas ni protocolos.
Hoy, quienes lo conocieron en esa etapa lo evocan con orgullo, al saber que ese mismo hombre que caminó las calles de Ramos Arizpe y escuchó con atención a la gente, es ahora el sucesor de Pedro. Desde el Vaticano, encabezará a millones de fieles con una visión que ya ha tocado tierras coahuilenses, donde dejó una pequeña pero significativa huella que hoy cobra nuevo significado.
arg