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Don Martín, huarachero decano del calzado lagunero; oficio por perecer

Atendido por tres generaciones familiares, 'La Huarachería El norteño' en Torreón ha actualizado su servicio con el pasar de los años, adaptándose.

Frente a su máquina de coser, Martín Muruato se mantiene atento para poder hacer un trazo limpio sobre la piel de las botas. Se trata de una reparación donde incluso cambiará las suelas. De la confección de huaraches y zapatos escolares para niñas con el pie grande, los cintos, carteras, bolsas y otros rios en este negocio familiar ubicado en Torreón, Coahuila, son absolutamente funcionales.

Martín sabe que el taller lo abrió su abuelo Manuel de Ávila, mismo que continuó con el empeño de su madre Paula. Ahora Martín es su líder y sabe que el oficio está en peligro de desaparecer, no por falta de clientes sino de continuidad familiar aunque de este local haya surgido el dinero suficiente para que todos los hijos tuvieran una vida digna y una carrera universitaria.

“Este negocio es de familia y yo tengo al menos treinta años, la huarachería se llama El norteño; nos ubicamos en la calle Viesca del Mercado Alianza; aquí trabajábamos mi mamá, un hermano y yo, pero esto viene de mis abuelos maternos. Mi abuelo se llamaba Manuel de Ávila Márquez y mi mamá Paula de Ávila Quiñones, yo tengo 62 años y desde que estaba chiquito venía acá, desde los 14 ó 15 si no me falla la memoria”, platicó.

Abuelo de Martín inició la chispa del calzado en su familia

El abuelo de Martín era curtidor y fabricaba chamarras y calzado y eso le gustó también a Martín, además para ganarse el pan o traer en la bolsa un peso, le decía su abuelo, se tuvo que enseñar a trabajar y no perder el tiempo. Mente ocupada al fin de cuenta no genera vicios y los muchachos en el pasado llevaban dinero a casa y a sus bolsillos.

“Era parte de la cultura del trabajo, de no perder el tiempo como hoy en día, por las tardes con el celular. Ahorita hay trabajo pero los de mi generación, los que quedamos, yo creo que después ya no habrá quien haga esto, es lo que veo porque a los jóvenes de ahora no les gusta esto. Yo tengo hijos, un tiempo me ayudaron pero ya buscaron por su futuro porque a ellos les di carrera y todo", aseveró.
“Son tres hombres y dos niñas; las niñas son de mi segundo matrimonio y están en primaria y secundaria y con este trabajo y este taller sí sale para la escuela y los gastos; luego ni hace falta, vivimos de manera honesta, tranquila, en paz con dios principalmente. A dios tenemos mucho qué agradecerle y arrancamos con mucho trabajo”, agregó.

Ha actualizado su servicio con el pasar de los años

Martín dijo que de esta manera se confecciona en el taller fundas de celulares, de tablets, bolsos, cintos y hasta rios para parejas que buscan aventurarse en una intimidad algo más arriesgada.

“Tengo mucho trabajo y a mí me gusta entregar rápido, no me gusta tener los productos aquí porque luego se me maltratan, se ensucian por el polvo. Aquí se fabrican algunos huaraches y me han llegado chamaquitas de prepa que calzan del 8 y medio y zapato escolar para ellas no hay y aquí vienen y se los hacemos”, dijo Martín quien confirmó, también hacen modificaciones de zapatos de mujer para la comunidad LGTB.
“Aquí lo único que hacemos es reparar o modificar un poco el calzado para la comunidad gay. A las niñas de pie grande se les toma la medida; el pie descansa en una hoja de papel, dibujo la silueta, tomo medidas y sacamos todo. Sacamos cortes y a trabajar. Aquí los cobramos en 800 pesos. Todo lo que aquí hacemos o reparamos tiene garantía pero ya ni regresan. Aquí vienen con cintos de marca que deben repararse, de buen material, aquí un cinto se hace por 300 pesos, personalizado sube el precio", comentó.
"Fabricamos correas para acordeón, talis para guitarra, no nada más es calzado, reparamos monturas de caballos y la gente a veces viene con gustos medios rarillos y también trabajamos, gente que quiere trabajos especiales… una vez vino una pareja sadomasoquistas y ya te imaginarás lo que pidieron, querían algo de cuero y se fueron contentos, eran muy jóvenes”, agregó.

¿Cómo ar a Martín Muruato? 

Lo que vende y lo que fabrican también ha encontrado nicho en las redes sociales pues esta huarachería tiene su Facebook. Martín Muruato dijo que los clientes también le pueden llamar a su teléfono celular 871 1403 189.

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Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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