El año 2024 marcó un hecho histórico en el futbol mexicano, por primera vez en la época del futbol profesional no hubo ningún entrenador de origen nacional en ninguna de las dos Liguilla de la Liga Mx, un factor que demuestra la crisis que atraviesan los técnicos nacidos en México para lograr encabezar un proyecto deportivo.
Para el Clausura 2025 apenas tres entrenadores mexicanos estuvieron al frente de un banquillo de Primera División: Víctor Manuel Vucetich en Mazatlán, Benjamín Mora en Querétaro y Gonzalo Pineda en Atlas; la cifra más baja en la historia del futbol mexicano.
Cambios sin efecto
Es cierto que a lo largo del semestre se dieron movimientos en los banquillos, incluso se duplicó el número de entrenadores mexicanos, pero eso tampoco fue un cambio radical en las aspiraciones de los equipos que apostaron por algún técnico nacional. Gerardo Espinoza asumió en Chivas en relevo del español Óscar García, Cirilo Saucedo en Tijuana en lugar de Juan Carlos Osorio y Efraín Juárez en Pumas llegó para sustituir a Gustavo Lema.
Hasta las últimas dos jornadas, algunos de ellos llegaron con opciones de pelear por lo menos por estar en el Play In, de hecho, en la última jornada tanto Juárez como Espinoza se disputaron en sus respectivos frentes el pase al último sitio de la zona previa, aunque los Pumas perdieron en Monterrey con Tigres, Chivas no pudo vencer a Atlas y se quedó eliminado.
Solo el relevo de Juárez en Universidad Nacional tuvo un impacto en la dinámica del club, Efraín llegó a impregnar al plantel un orgullo y coraje que no se veía en el conjunto universitario, el cuadro del Pedregal se convirtió en un equipo que busca un juego equilibrado, pero también trata de ofender con más orden, ha optimizado recursos y le ha devuelto el ADN que parecía extraviado de los siete partidos en los que ha sido responsable de Pumas, Efraín ganó tres, empató uno y perdió tres.
Contra el más joven
En busca del Play In, Juárez tiene un doble desafío, va contra corriente, pues para llegar a la Liguilla no le basta con ganar un partido, sino que deberá ganar dos y deberá hacerlo en condición de visitante para tratar de quedarse con el octavo boleto a la fiesta grande.
La primera parada lo llevará a Ciudad Juárez, para medirse a los Bravos de Martín Varini, el entrenador más joven que hubo este torneo en la Liga Mx, el charrúa tiene 33 años, mientras Efraín cuenta con 37. Con Varini, los Bravos disputaron 9 partidos, ganaron 4, empataron 3 y perdieron 2. Mientras, Efraín dirigió 4 juegos como visitante a Universidad Nacional, ganó 2 y perdió 2.
Poder y experiencia
En caso de ganar, Efraín no podrá cantar victoria, pues aún deberá medirse a otro entrenador extranjero, ya sea Martín Demichelis de Monterrey o Guillermo Almada de Pachuca.
En cualquiera de los casos volverá a salir en condición de víctima y no es para menos, Rayados cuenta con una de las mejores plantillas y ya vino a CU a ganarle a Pumas; mientras Almada es uno de los entrenadores con más experiencia, y uno de los que ya sabe lo que es ser campeón en la Liga Mx. Y en cualquier escenario tendrá que volver a jugar de visitante, otro obstáculo a superar.
Efraín Juárez Valdéz forma parte de la nueva generación de entrenadores mexicanos que quiere reescribir la historia del técnico nacional, no es nada sencillo hacerlo, el desafío que tiene por delante a partir de este fin de semana puede romper con una tendencia que es triste, desoladora y preocupante.
FRASES
“Estoy con ganas, ilusión y motivado porque veo momentos y segmentos de lo que pretende mi equipo; hay que tratar de hacer más largos esos momentos”
“Merecido estar ahí no nos han regalado nada, tenemos una oportunidad importante y veremos qué pasa en los últimos días”
Efraín Juárez
Entrenador de Pumas
MGC
