Este lunes 20 de enero, Donald Trump regresó a la Casa Blanca tras su mandato de 2017 a 2021, convirtiéndose en el 47º presidente de Estados Unidos tras vencer a Kamala Harris en las últimas elecciones estadunidenses.
En este importante evento, su esposa, Melania Trump, no solo acompañó al mandatario sino que también robó la atención con un sofisticado y elegante look que destacó por su sencillez y sofisticación.

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El look de Melania Trump: Elegancia sobria con mensajes sutiles
Melania Trump volvió a destacar por su impecable sentido de la moda durante un evento de alta relevancia política.
Para la ocasión, optó por un abrigo largo y entallado diseñado por el neoyorquino Adam Lippes, complementado con un elegante sombrero de ribete blanco creado por el diseñador estadounidense Eric Javits.
Este abrigo de doble botonadura, combinado con una blusa blanca de cuello alto, proyectó una imagen clásica y refinada.
Completó el conjunto con guantes negros de cuero y un sombrero de ala ancha a juego, cuya sobriedad acentuaba el tono formal del look.

El azul oscuro con un guiño a la tradición
El azul oscuro predominante en este segundo conjunto contrastaba notablemente con el azul celeste que lució durante la primera investidura de su marido en 2017.
Mientras que el celeste evocaba inspiración y esperanza, el azul oscuro transmitió un mensaje de seriedad, formalidad e incluso cierta distancia emocional.
El sombrero, que en esta ocasión cubría gran parte de su rostro, añadió un aire de misterio, insinuando quizá un cambio en su enfoque como primera dama.Este estilo sobrio y cuidadosamente elaborado no es nuevo en Melania.
Durante su primera investidura en 2017, deslumbró con un traje azul celeste de Ralph Lauren, inspirado en los icónicos atuendos de Jackie Kennedy, una de las primeras damas más iradas de Estados Unidos.
En un cambio significativo respecto a elecciones anteriores, donde predominaban casas de moda europeas como Dior, Dolce & Gabbana y Saint Laurent, Melania eligió exclusivamente diseñadores estadounidenses para este evento.

Melania Trump ha demostrado, una vez más, su capacidad para combinar estilo, protocolo y mensajes simbólicos en cada uno de sus atuendos.
Su presencia en eventos de esta magnitud no solo marca tendencias, sino que también refuerza su imagen como una primera dama que entiende el poder comunicativo de la moda.
Este look, como muchos de los que lució durante su tiempo en la Casa Blanca, quedará como un referente de elegancia discreta y estratégica.