¡Arriba las Wagnermaníacas! Hoy quiero iniciar este espacio informativo con estás entusiastas palabras dedicadas a todas las mujeres que son madres, y que recientemente celebraron el día que la sociedad destinó para homenajearlas.
Sin duda, una celebración muy merecida, porque en todas las épocas de la historia de la humanidad, definitivamente ser mamá es una de las profesiones más difíciles y menos reconocidas.
En mi experiencia, en el hogar familiar, en el entorno que nos tocó vivir con mi padre viajando todo el tiempo para cumplir con sus compromisos luchísticos y cumplir con su papel de proveedor, siempre fue fundamental la presencia de mi señora madre.
Mamita, Doña Malena Barrón, fue y es una guerrera. Una mujer a quien debo manifestar una profunda iración, por su seguridad al conservar un matrimonio, con una figura pública del tamaño de Dr. Wagner.
Insisto, mi madre fue muy inteligente y tenía una frase que le decía a mi señor padre: “Lo que hagas de la puerta para afuera, no me interesa, pero lo que hagas de la puerta para adentro, sí. Deja tu dualidad en la entrada, aquí eres solamente Manuel González Rivera, padre de esta familia”.
Hasta la fecha es una mujer aguerrida que nos brindó una excelente educación, siempre nos dijo: “Independientemente de que sean hijos de una figura pública, quiero que sean personas productivas”. Esa enseñanza empezó desde el hogar, tendiendo nuestras camas, barriendo, lavando los platos y se lo agradezco, porque en la actualidad puedo apoyar a mi pareja, cocinando, lavando, planchando y no pasa nada.
¡Felicidades a la Wagnermaníaca mayor! Enhorabuena para todas las madres mexicanas y recuerden... En mi casa y con mi gente, a las madrecitas se les respeta. Bien, Bien, Bien.
Dr. Wagner Jr
Twitter: @WagnerJrOficial