Que ante la premura de la programación de los eventos que tuvo ayer la presidenta Claudia Sheinbaum, funcionarios fungieron como los conductores de los actos. En Ixtapaluca, Estado de México, en la asamblea del programa Salud Casa por Casa, el subsecretario de Bienestar, Jesús Valencia, se encargó de presentar a los asistentes y oradores. Más tarde en Temixco, Morelos, la secretaria de las Mujeres, Citlalli Hernández, fue la maestra de ceremonias en la inauguración del Centro Libre para las Mujeres. Los dos actos se programaron apenas el jueves, tras la cancelación de los eventos de Tlapa de Comonfort, Guerrero.
Que frente a los números que arroja la estrategia de seguridad oficial, coordinada por Omar García Harfuch, con más de 20 mil detenciones y una reducción de 27 por ciento de homicidios dolosos hasta mayo de 2025, ahora se pondrá también especial atención al sistema penitenciario, donde casi la mitad de las 275 cárceles tiene sobrepoblación, por lo que se contempla ampliar la infraestructura como parte de un plan integral que incluye los proyectos de Papantla y el penal que cedió Durango a la Federación como cartas viables para aliviar la presión en esa área.
Que quien explotó ayer con tono fuerte fue la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, quien acusó a las autoridades federales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas estadunidense de “sembrar el terror” con su operación para aprehender a 44 personas en esa ciudad, lo que motivó por lo menos un enfrentamiento en el que los policías usaron granadas aturdidoras. Ya son palabras mayores.
Que hablando de los vecinos, parece que al presidente de EU, Donald Trump, no se le ha bajado el coraje después del día de cruce de acusaciones con Elon Musk, quien abrió por X una rendija para hacer las paces. Sin embargo, el jefe de la Casa Blanca cerró toda posibilidad de hablar por un buen tiempo con el dueño de Tesla y de hecho se negó a tener una llamada telefónica programada para ayer mismo, todo con el mundo pendiente en vilo.