Como parte de las investigaciones tras el asesinato de dos policías en Guadalupe, agentes ministeriales catearon un domicilio a 600 metros del lugar donde se registró el ataque.
Se informó que en el lugar no hubo detenidos, aunque sí el aseguramiento de armas de alto poder, chalecos tácticos y cartuchos de diversos calibres.
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El operativo se llevó a cabo en un inmueble ubicado en las calles Luis Donaldo Colosio y Andador, en la colonia Luis Donaldo Colosio.
Se trata de una vivienda con paredes de concreto y techo de lámina, en cuyo costado se ubica una especie de palapa o techumbre de metal.
En el lugar se aseguraron:
- Cuatro armas largas abastecidas
- Un rifle de postas
- Cargadores
- Cartuchos
- Ropa táctica
- Chalecos balísticos
También había dentro de la casa fornituras, mochilas, básculas, radiofrecuencias y decenas de chips telefónicos.
Trascendió que el lugar era una especie de escondite o guarida de supuestos integrantes de la delincuencia.
Dicho domicilio se localiza a poco más de 500 metros de las calles José López Portillo y Esther Mena, de la colonia Ampliación Nuevo México, donde el domingo en la mañana fueron atacados los policías.
Dos oficiales murieron durante la agresión, otro resultó con heridas de bala, y otro con lesiones por caída, al protegerse de los proyectiles.
Además, algo que llama la atención es que a un costado del domicilio cateado se encuentra una camioneta en aparente abandono, misma que presenta algunos impactos de bala; aunque pudiera pensarse que no son recientes.
Sin embargo, los investigadores de Servicios Periciales también toman en cuenta la camioneta Pick Up, que tiene de cuatro a cinco impactos de proyectil de arma de fuego.
mrg
