A doña Carlota la detuvieron por matar. A sus más de 70 años, empuñó un arma y disparó contra dos personas que, según su versión, le habían quitado su casa. El suceso ocurrió en Chalco el 2 de abril, día a partir del cual el Estado de México se vio obligado a reconocer lo que durante años se había callado: el despojo de propiedades es una epidemia silenciosa.
Mil 292 denuncias por invasión o despojo de propiedades se han recibido en la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) en lo que va del año; sin embargo, desde 2015 se han abierto más de 40 mil carpetas de investigación por este tipo de delito.
La incidencia se concentra en el Valle de México y zona oriente, donde se agrupa más de 50 por ciento de los casos. Ante este panorama, la Fiscalía creó una Unidad Especializada para atender estos ilícitos.
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En abril se recuperaron más de 130 inmuebles mediante operativos en los que también participa la Secretaría de Seguridad estatal. El titular de esta dependencia, Cristóbal Castañeda Camarillo, advirtió que dichas acciones continuarán en beneficio de los legítimos propietarios.
Datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) indican que, entre el 1 de enero de 2015 y el 31 de marzo de 2025, se denunciaron 42 mil 307 despojos de propiedades del estado, con un promedio de 4 mil 127 casos por año. El año con mayor número de reportes fue 2024, con 4 mil 936; sin embargo, este delito adquirió visibilidad hasta 2025, tras el caso de doña Carlota, en Chalco.
La información federal señala que la incidencia se concentra en el Valle de México y zona oriente; nueve de los 10 municipios con más denuncias se ubican en esas regiones. Durante el primer trimestre de 2025 se registraron mil 292 carpetas. Los municipios con más casos fueron Ecatepec, con 123; Tecámac, 98; Chimalhuacán, 75; Nezahualcóyotl, 68; Toluca, 67; Chalco, 64; Ixtapaluca, 53; Naucalpan, 42; Tultitlán, 41; y Zumpango, 35.
Estos 10 municipios acumularon 666 carpetas, es decir, el 51.55 por ciento del total estatal. De ellos, solo Toluca no pertenece a aquella metrópoli. Por otro lado, de los 125 municipios mexiquenses, solo en 27 no se registraron denuncias por este delito; en consecuencia, el fenómeno abarca 78.4% del territorio.
Ciudades Bicentenario, el origen el problema
Este fenómeno no nació solo. En buena medida se gestó en el sueño fallido de las Ciudades Bicentenario, proyectos inmobiliarios lanzados en el periodo de Enrique Peña Nieto, entonces gobernador mexiquense, las cuales prometían modernidad, crecimiento y servicios.
Estos desarrollos buscaban dinamizar la actividad económica y el crecimiento poblacional en la región. El proyecto se enfocó en la construcción de nuevas ciudades o en el desarrollo de las áreas ya existentes.
Pero en lugar de futuro, sembraron abandono. Las Ciudades Bicentenario se asentaron en Almoloya de Juárez, Atlacomulco, Jilotepec, Huehuetoca, Tecámac y Zumpango; sin embargo, no cumplieron con el ofrecimiento de servicios y empleos, dejando a muchos residentes en zonas sin infraestructura adecuada y con problemas de accesibilidad.
En un recorrido realizado por MILENIO se constató que muchas viviendas en estas ciudades se encuentran en zonas sin a agua, luz, drenaje y otros servicios básicos, lo que las hace prácticamente inhabitables.
La ubicación de las viviendas, lejos de los centros urbanos, complica el a empleos, escuelas y otros servicios, dificultando la vida de los habitantes.
Las constructoras de estos proyectos no cumplieron con las promesas de construir infraestructuras adicionales, como mercados, centros comerciales, escuelas y zonas industriales, lo que generó una mayor sensación de abandono y descontento.
Hoy, en fraccionamientos como Santa Teresa —con sus nueve secciones—, Casas Quma y El Dorado, en Huehuetoca; así como La Trinidad y Lomas del Lago, en Zumpango, hay cientos de viviendas abandonadas que han sido, en algunos casos, tomadas por terceras personas que se han apropiado de los inmuebles.
Una nueva Unidad, viejos fantasmas
En abril se registró el caso de doña Carlota. Sus víctimas presuntamente formaban parte de una familia que había invadido su casa. La señora de 72 años y dos hijos se encuentran en prisión, vinculados a proceso y en espera de sentencia. El caso generó visibilidad sobre las invasiones, lo que derivó en la creación de la Unidad Especial para la Investigación de los Delitos de Despojo y contra la Seguridad de la Propiedad y Posesión de Inmuebles, de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.
Desde su activación el 25 de abril, por esta Unidad se han recuperado casi 200 inmuebles en operativos conjuntos con fuerzas estatales y federales. El 29 de abril se informó de la recuperación de 135 inmuebles con situación de despojo en Ecatepec, Tecámac, Acolman, Chalco, Chicoloapan, La Paz, Naucalpan, Nezahualcóyotl y Zumpango. Las propiedades continúan en proceso de investigación y se espera su restitución a los legítimos dueños.
Luego, entre el 7 y el 10 de mayo, la Fiscalía General de Justicia, con apoyo de fuerzas federales, estatales y municipales, recuperó 37 inmuebles con carpetas de investigación por despojo en 10 municipios, como parte de la Estrategia para la Restitución de la Propiedad.
Los operativos se realizaron en Atlautla, Chalco, Chicoloapan, Chimalhuacán, Ecatepec, Ixtapaluca, La Paz, Nezahualcóyotl, Tecámac y Valle de Chalco.
La Fiscalía mantiene líneas de investigación en torno a grupos autodenominados sindicatos, con presencia en el Valle de México, que podrían estar implicados en hechos de despojo. En la llamada Operación Enjambre, también se investiga la posible participación de ex funcionarios del gobierno municipal de Ecatepec, acusados de facilitar o tolerar estas prácticas. Además, se sospecha de redes que involucran a falsos gestores, notarios cómplices y hasta asociaciones vecinales fantasma.
Vecinos en pie de guerra
En el circuito Copilco, Ecatepec, la guerra es diaria, pues éste se ha convertido en un blanco fácil para los invasores. En lo que va del año han intentado apropiarse de dos viviendas; el hecho más reciente se registró hace una semana y media, cuando un grupo de personas rompió las chapas de la casa marcada con el número 59 para apropiarse del inmueble.
“Un grupo de cinco o seis personas llegaron en un carro enfrente de esa misma casa y al ver que no había tanto movimiento en la calle, supongo que les dio más confianza de intentar entrar, pues la casa lleva años... sí tiene dueño obviamente, pero pues no la habitan y pues... se aprovecharon de esa situación, intentaron entrar y abrieron a la fuerza esta casa y pues pudieron acceder”, detalló un colono, quien pidió anonimato.
Vecinos alertaron a las autoridades y a los dueños del lugar, quienes acudieron para recuperar la vivienda; al verse acorralados, los invasores decidieron escapar para evitar ser detenidos.
“Han intentado meterse de paracaidistas, sin embargo, pues igual se reporta de manera rápida a los vecinos y alguno de ellos tiene el o directo con los dueños, y se logra hacer algo y en este caso, pues también se llevó a cerrar y tiene... trae candados y todo eso, ¿no?”, dijo.
Por ello, los vecinos han creado un pequeño escudo ciudadano: cámaras, alarmas y grupos de WhatsApp. Saben que si una casa parece abandonada, no pasará mucho antes de que alguien rompa una chapa, cambie la cerradura y se instale como nuevo dueño.
Edomex encabeza el ranking nacional
A nivel nacional, el estado es el epicentro del despojo: 18% de los casos registrados en el país en lo que va del año ocurrieron aquí.
Con mil 292 carpetas de investigación en los primeros tres meses del año, el Estado de México registró la cifra más alta en el delito de despojo en todo el país, de acuerdo con cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
A nivel nacional, las Fiscalías y Procuradurías reportaron un total de 7 mil 174 casos de despojo. Debido también a su alta densidad poblacional, Edomex ocupó el primer lugar con casi mil 300 casos, lo que significó 18% de la incidencia nacional y un promedio de 14 despojos diarios.
En segundo lugar apareció Ciudad de México, con 887 casos, seguida de Guanajuato (424), Veracruz (398), Puebla (347), Nuevo León (352) y Jalisco (331).
La Fiscalía asegura que la nueva Unidad no solo servirá para investigar, sino para crear inteligencia: mapas, patrones, conexiones entre invasores, etcétera. Hay quienes, como los vecinos de Copilco, no están dispuestos a ceder ni una puerta más.
El Estado de México está en disputa. No por ideologías, no por territorio. Por casas. Por el temor de que el techo bajo el que uno duerme puede ser arrancado por la fuerza.
