La primera edición de la CCXP MX, la del año pasado, estuvo excelente pero la segunda, la de este 2025, créame, estuvo mil veces mejor.
Apenas puedo creer lo que sucedió en el Centro Banamex de la Ciudad de México del 30 de mayo al 1 de junio.
Fueron miles, realmente miles de notas, de experiencias, de satisfacciones.
En el muy remoto caso de que usted no sepa de lo que le estoy hablando, por favor déjeme ponerla, ponerlo, rápidamente en antecedentes:
México es potencia mundial en la creación y consumo de contenidos, y desde siempre habíamos soñado con tener una Comic-Con (una convención de comics) de talla internacional.
Y aunque muchas instancias hacen muchas fiestas, algunas de ellas muy grandes, todo el año, siempre nos quedábamos a medias hasta que OCESA trajo la CCXP MX.
¿Qué es esto? La versión mexicana de la CCXP (Comic Culture Experience), la convención de cultura pop más grande de toda Latinoamérica, una aportación fundamental de Brasil.
Para no hacerle el cuento largo, esto es el paraíso de los que amamos el cine, las series, las animaciones, los videojuegos, el cosplay, los juguetes y todo, absolutamente todo lo que tiene que ver con cultura pop.
¿Cuáles son las grandes diferencias entre la CCXP MX y el resto de los eventos similares que existen no sólo en México, en toda Hispanoamérica?
El tamaño, el poder de convocatoria, la calidad de las experiencias, el cuidado en los detalles y hasta la seguridad.
Esto es masivo, lo que le sigue. Multitudes, multitudes y multitudes, pero todas felices. Van desde fanáticos disfrazados hasta personas con discapacidad. ¡La CCXP MX nos une!
Cuando hablamos de poder de convocatoria hablamos de las más grandes estrellas de Hollywood, de Japón y de muchos otros puntos del planeta que vienen expresamente a presentarse ahí.
¿Para qué? Para dar las primicias de sus contenidos, para dejarse entrevistar por la prensa y los influencers, y para convivir con sus fans en un montón de variantes.
¿En qué otro lugar puede usted ver, por ejemplo, a John Cena comiendo chapulines, a los genios del ánime “Demon Slayer” atendiendo a sus audiencias, a las estrellas de las series de Paramount+ dando entrevistas, a nuestros amados talentos mexicanos de la animación y el doblaje, y a la gente concursando, jugando y comprando tantísimos objetos de colección?
Todo al mismo tiempo, en un mismo lugar. Y no le he dicho nada. La sola mención de cada una de las celebridades que anduvieron por ahí, de cada una de las actividades, da para muchas columnas.
¿A qué me refiero cuando hablo de la calidad de las experiencias? Lo voy a decir con mucho respeto. Por favor no me vaya a malinterpretar. A que esto no es un tianguis.
Amo los tianguis pero no, aquí hay orden, metodología, profesionalismo, respeto y espacio, mucho espacio para esperar cada evento, cada juego, cada compra.
Hablemos ahora del cuidado en los detalles. La CCXP MX es un evento donde la gente puede pasear cómoda. Hay lockers, señalización, la temperatura siempre es agradable.
Perdón pero estas sutilezas sí hacen una diferencia. Y ni hablemos de la selección de marcas que participan porque entonces no acabaríamos nunca.
Rematemos con la seguridad: ¿sabe usted lo que es poder ir en familia a una fiesta de esta naturaleza?
Hay “convenciones” prohibidas para las niñas y los niños. Las CCXP MX no es así. Es para todas, todos y todes sin importar edades. Sin importar nada.
¿Cuál es la nota? ¿Cuál es la relevancia periodística de esto? Que en tan sólo dos años, OCESA le ha regalado al pueblo de México una nueva tradición, un evento que amamos y que ya esperamos.
Va a llegar un punto en que esto tenga que durar más de tres días porque es inabarcable. Porque es, realmente, maravilloso. ¡Nos vemos en 2026! ¡Felicidades!
