El papa Francisco, primer obispo de Roma de origen latinoamericano, murió la mañana del 21 de abril en su residencia de Santa Marta, en la Ciudad del Vaticano, a los 88 años de edad.
Tras el fallecimiento del sumo pontífice, el Vaticano llevará a cabo un protocolo funerario que recibió modificaciones en 2024 a petición de Jorge Mario Bergoglio, nombre secular del jesuita argentino. ¿Cómo será este proceso y qué dijo el papa Francisco al respecto en su libro? En MILENIO te compartimos los detalles.
Un ritual sin exageraciones: la petición del papa Francisco
El 14 de enero de 2025 llegó a las librerías de Italia Esperanza, el libro autobiográfico del papa Francisco. Un mes antes, el obispo de Roma reveló que se tenía previsto que la obra fuera publicada tras su fallecimiento, pero lo hicieron antes para que no perdiera actualidad.
En el texto, el papa Francisco dejó en claro su deseo por tener un rito funerario alejado de la rimbombancia que se acostumbra en la Iglesia católica.
"Las exequias del Romano Pontífice son las de un pastor y discípulo de Cristo y no las de un poderoso hombre de este mundo", mencionó en su autobiografía.

Bajo la misma narrativa, el papa Francisco pidió que no lo enterraran en la Basílica de San Pedro, sino en Santa María La Mayor. "El Vaticano es la casa de mi último servicio, no la de la eternidad", manifestó en su autobiografía.
"Estaré en la habitación en la que ahora custodian los candelabros, cerca de esa Reina de la Paz a la que he pedido ayuda siempre y por la que me he hecho abrazar durante mi pontificado más de cien veces. Me han confirmado que todo está preparado", agregó el papa Francisco.
¿Cómo será el funeral del papa Francisco?
El protocolo oficial establece que el cardenal camarlengo, actualmente Kevin Joseph Farrell, será el encargado de declarar oficialmente el deceso del pontífice si al llamarlo tres veces por su nombre de bautizo no hay respuesta.
La constatación de su muerte, para la cual deberá participar un médico, ya no será en la habitación del difunto, sino en su capilla privada, de acuerdo con lo estipulado en la nueva edición del libro litúrgico Ordo Exsequiarum Romani Pontificis, aprobado en abril de 2024.
El cuerpo del papa Francisco será colocado inmediatamente en un único ataúd de madera con interior de zinc, antes de su traslado a la Basílica Vaticana. La caja permanecerá cerrada en la víspera de la misa exequial.
Ya en la Basílica los restos del papa Francisco serán exhibidos directamente en el féretro —se eliminó la tradición del catafalco y de un féretro alto— y, finalmente, serán trasladados para su entierro.
"El ritual de las exequias era demasiado ampuloso y he hablado con el maestro de ceremonias para aligerarlo: nada de catafalco, ninguna ceremonia para el cierre del ataúd. Con dignidad, pero como todo cristiano", detalló el papa Francisco en su libro.
BM.