“El domingo 1 de junio, el ex presidente Andrés Manuel López Obrador tuvo su primera aparición en público luego de 8 meses exactos desde que dejó el cargo. Fue muy breve y únicamente envió un mensaje al pueblo de México, celebrando que por primera vez elegía a jueces, magistrados y ministros. Entró al centro de votación, tardó 10 minutos en el proceso, pues ya llevaba acordeón, y a la salida simplemente agradeció a los Yunes por el respaldo que dieron a su iniciativa de reforma judicial que el fin de semana se volvió una realidad”.
Aunque suene a broma, la participación del ex presidente en la elección judicial del domingo es crucial para convalidar su ocurrencia de hace un año. Él fue el principal promotor de la destrucción de la composición actual del Poder Judicial y propuso renovarlo a través del voto ciudadano. Sería ilógico que no participe, siendo parte del pueblo de México y ex líder del movimiento que sigue promoviendo la importancia de esta elección.
Su participación no podría quedar en silencio. Los centros de votación contarán con presencia ciudadana, que tiene celulares para grabarlo. Además, los reporteros más astutos averiguarán la casilla que le corresponde y harán guardia para captar su arribo, tiempo en el centro de votación y salida.
La única alternativa para participar sin salir de su casa es votando de forma anticipada, pero no a todos se los permiten. La condición para recibir las boletas a domicilio es ser una persona postrada. Y ese no es el caso. Los que hablan de él aseguran que está en su quinta de Palenque, escribiendo y siguiendo una rutina muy estricta. Así es que puede desplazarse sin problema a votar.
Para los que digan que su reaparición incomodaría a la presidenta Sheinbaum, creo que hasta lo agradecería. Pues es él quien debe hacerse responsable del proceso tan improvisado en el que nos metió a los mexicanos. Y su participación atajaría el boicot al que “la derecha” está convocando. Si AMLO no va a votar, sería parte de ese boicot.
Imagínense, sería como construir un nuevo aeropuerto y no utilizarlo o gastar miles de millones de dólares en una refinería que no refina. Momento. Él no utilizó el AIFA y la refinería de Dos Bocas casi no refina. Así que es probable que AMLO no vote el domingo, aunque él sea el más entusiasmado en que todos participemos en la renovación del Poder Judicial a través del voto popular.