Alejandrina Pedro, escritora, investigadora y poeta mazateca, viene de una familia de mujeres que se ha dedicado a la medicina tradicional. En la Sierra Mazateca, a 10 minutos del municipio Huatla de Jiménez, Oaxaca, Alejandrina se ha embarcado en la misión de resguardar “la sabiduría ancestral que tenemos como mazatecos”. En entrevista cuenta que desde los seis años presenciaba ceremonias que se hacían para mantener la armonía familiar.
Fue a partir de la curiosidad, aún siendo niña, que se acercó a la herbolaria y empezó a guiar sus primeras ceremonias. Así aprendió que esa misión —como ella le llama— requería de una gran responsabilidad, “no sólo hacia la medicina, la cultura o la parte divina, sino también hacia la gente y hacia uno mismo”.
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“Empecé a interesarme en las propiedades de las plantas, cómo actuaban, cuál era su poder para curar un órgano o un problema. Y cuando me di cuenta ya estaba muy adentro realizando no nada más lo que es el conocimiento de la herbolaria, sino el conocimiento de la medicina de los honguitos, de la salvia divinorum y otras plantas de poder”.
Alejandrina Pedro dictará la conferencia magistral “Usos ritualistas y tradiciones milenarias” como parte de las 260 actividades que conforman Spora Festival del Bosque de Chapultepec, que se realiza del 17 al 20 de abril en 18 sedes distribuidas en la primera, segunda y cuarta sección. La conversación tendrá lugar el 20 de abril, a las 12:45, en el Foro La Milla. En esta, Alejandrina Pedro dará un acercamiento a las ceremonias desde el proceso de recolección, cómo se realizan las ceremonias y cuáles son los beneficios que aportan los hongos dependiendo de la situación o enfermedad que se aborda.
Por su parte, la bióloga Amaranta Terrazo, quien también participa en la edición de Spora, se ha especializado en la micología y la antropología: “la humanidad siempre ha estado aglutinada en culturas o en sociedades y se ha relacionado con los elementos del entorno. Entonces, las culturas primero aprenden a observar y a reconocer estos elementos que les podrían beneficiar de una u otra manera y a partir de sus características empiezan a jugar un papel dentro de su cosmovisión”.
En el caso de los hongos, dice Terrazo, han sido parte de la subsistencia desde el inicio de la humanidad como comida, medicina tradicional, usos ceremoniales e incluso para generar fuego, pues fueron de las primeras yescas que se utilizaron al inicio de las sociedades humanas; se ha construido un conocimiento tradicional alrededor de ellos, lo que permite que hasta la actualidad las culturas sigan aprovechando sus propiedades.
Además, explica, “en los ecosistemas, los hongos dentro de las cadenas tróficas se encuentran en el grupo de los degradadores; el mecanismo por el cual se alimentan es por absorción y al absorber los nutrientes los ponen disponibles para otras funciones en el bosque, por ejemplo, la simbiosis micorrízica que tienen el 70 u 80 por ciento de las plantas”. Sin los organismos degradadores, dice “el planeta estaría cubierto de desechos orgánicos”.
De acuerdo con Terrazo, se estima que existen 1.5 millones de especies de hongos, entre macroscópicos y microscópicos, de los cuales solo se conoce el 5 por ciento.
México es el segundo país con el mayor consumo de hongos. Sin embargo, “conocemos muy poco de la diversidad de los hongos y muchos, con el cambio climático, la deforestación y la extinción de algunos ecosistemas, están en riesgo de extinguirse”.
A esto se suman problemáticas como el impacto que puede generar el micoturismo descontrolado, el cual explica la bióloga, puede poner en riesgo los saberes locales y la propiedad intelectual del conocimiento alrededor de los hongos, así como el territorio y la diversidad de especies.
Además de la gourmetización de los hongos, que provoca el encarecimiento del producto y pone en riesgo la capacidad de adquisición para las comunidades que consumen hongos, ya sea como parte de su alimentación o para uso medicinal y ceremonial.
Frente a estos fenómenos, dice Amaranta Terrazo, se han organizado campañas para fortalecer los saberes locales y que estos se reconozcan como parte de la identidad cultural de las comunidades. Sin embargo, afirma que existen muchos huecos de información que impiden proteger y regular este tipo de situaciones.
La bióloga Amaranta Terrazo también participa en el Festival Spora con el taller “Delicias y peligros de los hongos” el 18 de abril, a las 12:00 horas, en el Centro de Cultura Ambiental; el 19 de abril presenta el Diccionario gastronómico de hongos, a las 16:30 horas, en el Foro La Milla, y en el conversatorio “Mitos y realidades de los hongos” el 20 de abril, a las 15:30 horas, también en el Foro La Milla.
Para consultar las actividades y horarios de Spora Festival del Bosque de Chapultepec se puede consultar este enlace.
PCL