La Universidad Tecnológica del Valle del Mezquital (UTVM), ubicada en Ixmiquilpan, Hidalgo, se encuentra en una región estratégica, reconocida por su riqueza sociocultural y la significativa presencia del pueblo hñähñu.La geografía semidesértica ha influido en las formas de organización comunitaria y en las estrategias de subsistencia de sus habitantes. En este contexto, la diversidad lingüística constituye un eje central de la identidad regional, con el español como lengua predominante y alrededor de 34,500 hablantes de lenguas indígenas, según el Censo de 2020. Sin embargo, el hñähñu enfrenta un proceso de desplazamiento lingüístico debido a la discriminación sociolingüística y la urbanización.
Frente a esta realidad, la UTVM tiene la oportunidad de fortalecer una educación que no únicamente respete la diversidad, sino que la integre como un eje central del aprendizaje y del desarrollo regional.
El Nuevo Modelo Educativo 2024 de las Universidades del Subsistema Tecnológico de México (UST) se sustenta en un enfoque humanista e inclusivo, en el cual la interculturalidad no es sólo un principio teórico, sino una estrategia de formación integral (DGUTyP, 2024). Este modelo promueve el respeto a los derechos humanos, la igualdad de género y la educación como un derecho fundamental, alineándose con principios educativos internacionales (UNESCO, 2019).
La interculturalidad en el ámbito universitario implica más que la mera coexistencia de culturas; requiere un modelo educativo basado en el diálogo, el reconocimiento mutuo y la equidad en oportunidades. En esta casa de estudios este enfoque debe reflejarse en estrategias pedagógicas que integren los diálogos de saberes y la enseñanza de lenguas originarias. Es fundamental implementar metodologías participativas y fortalecer programas de tutoría intercultural. Asimismo, se deben desarrollar proyectos de vinculación comunitaria que articulen el conocimiento académico con las realidades socioculturales del Valle del Mezquital.
La interculturalidad debe concebirse como un espacio de aprendizaje equitativo, donde las culturas interactúen en condiciones de diálogo y reciprocidad (Walsh, 2009). La UTVM debe no sólo facilitar el de estudiantes indígenas, sino también incorporar sus conocimientos en la formación profesional. Si bien se han realizado esfuerzos en esta dirección—como la inclusión de intérpretes para estudiantes sordos—persiste la necesidad de una mayor capacitación y sensibilización en materia de educación intercultural e inclusiva.
Por último, el Nuevo Modelo Educativo 2024 enfatiza la sostenibilidad como un principio educativo que articula dimensiones sociales, económicas y ambientales (DGUTyP, 2024). En este marco, la diversidad cultural es un recurso clave para el desarrollo sostenible, ya que ofrece una perspectiva amplia y contextualizada sobre los desafíos actuales.
La UTVM, ubicada en una región con fuerte arraigo a las prácticas agrícolas tradicionales y un profundo conocimiento del territorio, tiene la oportunidad de fortalecer su enseñanza desde un enfoque intercultural que valore estos saberes.
La implementación de proyectos comunitarios y el aprendizaje basado en la solución de problemas permitirá que las y los estudiantes desarrollen una visión más integral de la sustentabilidad y su vínculo con las comunidades locales.
Miguel Silvano Jiménez