Aunque suelen ser vistos como simples ejecutores del crimen organizado, los sicarios responden a perfiles mucho más complejos. Así lo reveló un estudio de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo —ubicada en Morelia— en la que participaron expertos en psicología criminal.
De acuerdo con la investigación, encabezada por Arcelia Ruiz Vázquez, detrás de cada asesinato por encargo existe un perfil psicológico específico. Lejos de los estereotipos cinematográficos, los especialistas han identificado al menos cuatro tipos, cada uno con motivaciones, métodos y características particulares. En MILENIO te explicamos.
¿Qué se entiende por sicario?
De acuerdo con Alex Schelenker, doctor en Estudios Culturales Latinoamericanos por la Universidad Andina Simón Bolívar, la figura del sicario es concebida como:
"Aquel individuo que asesina por encargo a cambio de un pago determinado, generalmente retribuido en dinero u otros bienes materiales, y en donde se establece una relación contractual que ubica al sicario como el autor material del crimen ordenado y pagado por un autor intelectual (sic)".
Entre sus características principales, destaca que, a diferencia de un asesinato espontáneo, el sicariato es premeditado, además de que quien comete el crimen no suele tener una relación directa con la víctima, sino que actúa por encargo de un tercero.
En México, la figura del sicario ha sido fuertemente vinculada con el narcotráfico y grupos paramilitares, aunque no necesariamente responde a ello.

Los cuatro tipos de sicarios
En el estudio realizado por la Universidad de Guanajuato, campus León; la Facultad de Psicología, de la Universidad Michoacana; y el Departamento de Psicología, de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, participaron 13 psicólogos y ocho criminólogos.
Los expertos indicaron que, de acorde con sus rasgos de personalidad, valores y motivación criminal, existen cuatro perfiles de sicarios en México.
Sicario marginal
Proviene de zonas de extrema marginación y pobreza. El artículo refiere que son personas altamente manipulables debido a su carente preparación académica, así como poco desarrollo de habilidades cognoscitivas.
Se les describe como individuos agresivos, impulsivos, que frecuentemente consumen alcohol. También presentan niveles de ansiedad durante sus primeros actos criminales, por lo que suelen utilizar sustancias nocivas.
"La motivación criminal primaria es la necesidad económica apremiante y la falta de oportunidades de trabajo en la legalidad".
Sicario antisocial
Se desarrolla en ambientes de clase baja o media baja en donde la violencia es común. Crecen en entornos donde es común el pandillerismo, abuso de drogas, fracaso escolar, empleo informal y el poco respeto a las normas sociales.
"La violencia es parte del aprendizaje social y el delito una forma de vida aceptada e incluso alentada en su contexto socio cultural".
Los expertos señalan que el sicario antisocial proviene de familias disfuncionales, donde es recurrente el maltrato y el abuso de estupefacientes.
En cuanto a su personalidad, suelen ser individuos que desde su infancia presentan rasgos como expulsiones escolares, agresiones, trasgresión de normas y conflictos con las figuras de autoridad.
"Asimismo, existe una marcada presencia de rasgos de personalidad como: baja tolerancia a la frustración, impulsividad, agresividad, violencia reactiva, temeridad, tendencia al aburrimiento, gusto por la novedad, ası́ como un fuerte sentimiento de venganza y resentimiento ante una sociedad que, según su percepción, los ha marginado".
Su motivación es económica y psicológica, al buscar poder, reconocimiento y estatus social.

Sicario psicopático
Los expertos señalan que este tipo de asesinos tienen una disfuncionalidad en los apegos dentro de su dinámica familiar, una baja estimulación afectiva y son incapaces de establecer límites.
Desde temprana edad, muestran rasgos psicopáticos como: impulsividad, ausencia de remordimiento por daño a terceros, mentira patológica, gusto por la tortura, indiferencia ante el castigo e irresponsabilidad.
"Su trayectoria criminal inicia generalmente en la niñez o en la adolescencia, cometiendo conductas antisociales como: transgresiones del orden público, robos, estafas, venta de droga, lesiones e incluso homicidios".
Se trata de sicarios que pueden asesinar a menores de edad, familias y población en general sin sentir culpa, ya que percibe el sicariato como una actividad laboral.
"Presenta marcados rasgos psicopáticos, donde la frialdad emocional, la crueldad y la falta de empatía con la que realizan las ejecuciones, aunado a sus habilidades cognoscitivas de análisis y su capacidad de liderazgo, lo convierten en un individuo altamente peligroso".
Sicario sádico
Se trata de un perfil con varias similitudes con el psicopático. No obstante, los expertos refieren que su rasgo distintivo es el sadismo.
El sadismo es una conducta o inclinación psicológica en la que una persona obtiene placer —físico, emocional o sexual— al causar dolor, sufrimiento o humillación a otros.
"La motivación criminal primaria del sicario sádico es de índole psicológico, por lo cual, buscará saciar sus pulsiones de odio y venganza a través de producir el mayor sufrimiento posible a sus victimas, durante prolongados periodos de tiempo".
RMV.